Lady in red

Erase una vez en algún lugar en el cual nunca debí estar, en un momento en el que no esperaba estar.

Era de esa clase de cosas que pudiste evitar pero los azares del destino son como son, pasajes caprichosos de la vida que hacen que las cosas pasen sin pensarlo y con cosas inesperadas hacen que tengamos momentos gratos que pueden inmortalizarse ante nuestro ojos.

Tal vez debí seguir lejos en el anonimato, distante, sólo apareciendo esporádicamente en alguna ocasión especial, seguir con lo que me obligaba la razón, lejos a pesar de que eso signifique seguir  separado de  todo y que todo siga partido en mi vida, tanto en tiempos como en distancias, esa distancia que me tenía tan cansado.

La historia que les voy a relatar posiblemente tenga algunas cosas alejadas de la realidad, sucesos que pasaron y que no tengo a quien contar y que solo este espacio me da algo de libertad sabiendo que nunca se sabrá lo aquí pueda confesar. La historia que nunca se podrá saber pero que guardaré cual cofre conteniendo mis más preciados tesoros y siendo algo que tal vez algun dia pueda compartirle a mis nietos o bisnietos si es que llego a tenerlos. No pensé vivir cosas dignas de  una de esas telenovelas  que tantas veces hemos visto y que en algunas cosas nos hace sentirnos identificados con lo que vemos en la ficción, sabiendo que nunca podrá convertirse en algo de la vida real.

Te dedico estas líneas a ti, persona especial que a pesar de conocer hace poco, supiste meterte sin querer, en un lugar muy especial de mi corazón y de mi mente sin que yo pueda hacer algo. Todo empezó como jugando y como dice una canción de Los Iracundos "No me di cuenta de ese juego y me enamore" y tal cual, fue tarde y ya no podia volver atras.

Puede que tenga la apariencia de un capricho pero que podemos hacer frente a cosas que están fuera de nuestro alcance y que esta dividido por una delgada línea como separando el caos de la paz. No por eso puedo dejar de ser sincero y decir que es una equivocación mía el haber faltado a tu confianza y teniendo dudas de algo que muy posiblemente tu tengas claras.

Ese juego que involucra a tres, dándonos todos esa confianza de la que hablé al principio y que convirtió en sentimientos algo que desde el inicio de todo tenía que estar tan claro. Esa es mi condena, es la pena que debo pagar en silencio y tratar de que no afecte la vida que tengo ahora.

Se que en este tiempo has conocido virtudes mías y seguro que defectos aún más, pero lo que si es seguro que al conocerme un poco mas, quizas ahora tengas otra idea sobre mi. no se si buena o mala, espero que un poco buena.

Entre tantos días, uno de esos en los que aun estaba acostumbrándome a mi nueva rutina, a la vida en casa con caos y adecuando a mis nuevos tiempos. No fue de casualidad, fue a solicitud de "V", reunirnos un dia a hacer algo, distraernos y pasar algo tiempo en distracciones propias de la edad y que poco a poco fuimos adoptándonos como grupo y bueno, siendo sinceros, pense que seria una de tantas, sin nada en especial y solo esperando que pase el tiempo y bueno, a seguir con la rutina.

Esas clases de salidas se volvieron algo seguidas que de costumbre, fueron días raros, entre tragos, música y otras cosas más fueron las causantes de conocerla un poco mas, saber que le causa tristeza, que le molesta, que le gusta y otras cosas que no puedo contar.

No recuerdo bien la fecha exacta, tendría que hacer memoria, fue uno de esos días en que no esperas tener novedades y esperas que todo siga como siempre, de esos que no esperas que aparezca algo que te haga alborotar tu tan preciada "rutina". Esta vez no fue una cena, salida o nada parecido, fue solo un dia comun y corriente invadiendo sus horas de estrés y como siempre comportandome con rasgos de timidez a pesar de tener algo de confianza. De eso si me doy cuenta,¿por que sere asi?.

Ese día fue mágico, lo sentí así, en una situación normal, no paso nada distinto pero hizo que si me preguntan por ella, esa sea la primera imagen que se me viene a la mente y en este momento justamente se me viene a la memoria esa fotografía -que buena camara de recuerdos es nuestro cerebro, es de como la vi ese dia- y que fue impactante, es difícil de explicar, se le veía tan bien, de rojo, haciendo juego con su sutil maquillaje y sus gafas que hacen juego perfecto con sus ojos. En fin, espectacular.

No recuerdo haberla visto en otra ocasión vestida de rojo pero para mi, el rojo es su color y espero poder verla nuevamente de ese color aunque cada vez se va poniendo difícil ya que las salidas no son tan seguidas y las conversaciones peor aún. 

Ese es mi pequeño relato de la dama de rojo.

 Y no es que el rojo sea mi color favorito ya que el mío siempre será el azul pero, podría adoptarlo como segundo color.