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Llevaba algo de un año en Piura, un ex compañero de trabajo de Chiclayo me pasó una fotografía de una chica, estaba guapa, se lo dije pero el insistió que era medio loca, solo por molestar le insistí que me la presente pero solo se reía y así hasta que quedó en nada. Luego de unos días, recibo un mensaje de un numero desconocido a mi WhatsApp, era ella y estaba guapa como dice la canción, conversamos por días, semanas y se le notaba tal como me lo dijo mi ex compañero, medio loca y lanzada. Era la primera vez que estaba conversando con alguien tan lanzada, recuerdo que hacíamos video llamada y un día de tantos, la cosa se puso medio hot, solo media y comenzamos a conversar de cosas en doble sentido, y ella comenzó a indagar sobre mi vida, obviamente le dije que era casado y según ella no le importó y seguimos conversando hasta que un día me invitó a visitarla y tanto fue la insistencia que luego de algunas semanas fui a verla a Chiclayo, recuerdo que me esperó en la agencia, era de noche pero fuí con la condición de que no podría estar mucho tiempo y pues, nos vimos y salimos huyendo -a sugerencia  suya- ya que no quería que alguien la vea con un extraño, con la excusa de asearme, fuimos a un hotel cercano, entramos cual pareja y se dio, la verdad que si era una loca, no voy a decir que hice cosas que nunca hice porque yo a esas alturas ya había hecho de todo con esposa, pero si era una loca, pasamos el tiempo, repetimos algunas veces y me tuve que ir...Viaje fugaz.

Los días siguieron normal pero me di cuenta que ella estaba volviéndose un poco posesiva, tal es el punto que un día sábado que yo estaba en Trujillo, en mi cama, siendo las 11 de la noche y ella teniendo instrucciones que no me podía llamar ni escribir los fines de semana, lo hizo pero no contesté. Eso hizo que me diera cuenta que en verdad estaba loca, decidí alejarme, no le volví a escribir hasta unas semanas después que me llamó de otro numero y no me quedó mas remedio que decirle el por qué de mi reacción.

Al comienzo ella entendió, seguimos conversando y ya no cometía esos errores de llamarme cuando estaba en Trujillo pero un día me sorprendió, por trabajo fue a Piura unos días, de verdad me tomó por sorpresa y no me quedó opción que verla. Me sirvió mucho para analizarla un poco más, me di cuenta que es medio sangrona, que tenia un toque vulgar que hacía que sus relaciones no duren mucho -según lo que me contaba- y bueno, esos días tuve mucha actividad sexual pero me quedó un sin sabor de querer desligarme de ella, por ratos me caía mal.

Finalmente ella se fué, volvió todo a la normalidad pero ella seguía buscándome, se volvió algo posesiva y pues creo que ya se estaba convirtiendo en un peligro, trataba de no conservarle mucho hasta que nos fuimos alejando y casi ni hablábamos, fue un alivio para mí, una preocupación menos.

Ese es el riesgo cuando uno se topa con mujeres que sabiendo que no podemos llegar a más, en su mente creen que tienen el mando.

Pero luego de un periodo largo, volví a tener contacto con ella, no se como pero se enteró que yo tendría que ir por trabajo una semana a Chiclayo, se le notaba tranquila, risueña y bueno...me convenció de vernos - grave error- cosa que no debí hacerlo pero el placer carnal pudo mas. Tengo que aclarar que todo este tiempo, el placer carnal fue lo único vinculante a ella a pesar de la calentura del momento yo nunca pensé en algo mas con ella. Yo era un hombre comprometido y con familia que no veía como opción el seguir en algo mas con ella.

Finalmente nos vimos, todo fue como lo acordado pero algo en ella hizo que al igual que otras ocasiones anteriores, me sienta algo utilizado, económicamente hablando ella aprovechaba cada vez que podía en pedirme algo - incluido el precio obviamente- que hizo que se vuelva en alguien insoportable, posiblemente ella pensaba en algo más, no lo sé; pero no iba a arriesgarme por ella y por mas frío que suene...no valía la pena.

Pasaron unos años y otra vez tuve contacto con ella por las redes sociales, me contó que hace poco tuvo un hijo con un hombre con familia y que tenía muchos problemas con el padre del niño ya que no quería dejar a su familia por ella y obviamente me habló de sus problemas de dinero -claro, como no- y pues conversamos unas cuentas veces de las cuales todo siempre terminaba con: "regalame algo" y siempre encontraba una risa como respuesta.

No estaba del todo mal por lo que vi después, se fue de vacaciones a Cusco, me da gusto que no tenga esos apuros.

Espero no volverla a ver.